Visitar Barcelona en cinco días

La Ciudad Condal ofrece una gran variedad de actividades culturales y de ocio que cada año atrae a millones de turistas. Muchos de ellos cuentan con el tiempo justo para realizar una ruta rápida por los lugares más emblemáticos, pero otros muchos deciden dedicar a la ciudad el tiempo que se merece y disfrutar de todos sus atractivos de una manera más relajada.

Para los afortunados que puedan aprovechar una semana en Barcelona, la forma más rápida y barata de recorrer la ciudad es utilizar el transporte público y comprar alguna tarjeta turística. De esta manera, todos los viajeros podrán conocer los lugares y zonas más famosas de la ciudad sin perder tiempo ni dinero en los desplazamientos. Una posible ruta para descubrir todos estos lugares es la siguiente:

Día 1: El Raval, Plaza España y Montjuïc

La ruta comienza en la Plaza Cataluña desde donde se puede llegar caminando hasta el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona. Después de visitar el museo, la mejor opción es conocer el barrio del Raval, pasear por La Rambla del Raval y visitar el Palau Güell y el Monasterio de Sant Pau. Tras las visitas será hora de comer algo en alguno de los restaurantes de la zona.

Después de comer la ruta continúa tomando el funicular que conecta la ciudad con la montaña de Montjuïc y que ofrece unas impresionantes vistas. En la cumbre se puede conocer la Torre Calatrava, el Palau Sant Jordi y el Estadio Olímpico, para después visitar el original Pueblo Español. Los que disfruten de los museos podrán entrar en el Museo Nacional de Arte de Cataluña y en la Fundación Miró, para después contemplar el atardecer desde lo alto de la montaña. Tras admirar las vistas de la ciudad lo mejor es descender la ladera y disfrutar del espectáculo de la Fuente Mágica de Montjuïc, antes de pasear por la Avenida María Cristina, entre la Fira Barcelona y las Torres Venecianas. Después nada mejor que descansar y cenar algo en alguno de los restaurantes cercanos a la Plaza España.

3días-sagradaDía 2: Las Ramblas y la Sagrada Familia

La ruta del segundo día comienza en el Monumento de Colón y continúa paseando por la siempre animada Rambla. Durante este recorrido se puede visitar el Gran Teatro del Liceu, el Mercado de La Boquería y la Plaza Real. Después la ruta continúa desplazándose en metro hasta la Sagrada Familia, donde se puede realizar una visita guiada por el interior para después comer en alguno de los restaurantes que rodean la catedral.

Por la tarde la visita continúa por a la avenida Gaudí hasta llegar al Hospital de Santa Cruz y Sant Pau. Para terminar la tarde no hay mejor broche que desplazarse hasta el Parque Güell y contemplar las vistas de la ciudad mientras atardece.

Día 3: Paseo de Gracia, Barrio Gótico y Zona de Born

El tercer día el recorrido comienza en el Paseo de Gracia, donde contemplar edificios como la Casa Fuster, La Pedrera o la Casa Batlló, y caminar hasta llegar a la Plaza Cataluña. Después continuar la ruta paseando por la Avenida del Portal de l’Angel, llegar a la Catedral de Barcelona en la Plaza Nova y continuar hacia la Plaza del Pi. Antes de parar a comer, la mejor opción es llegar caminando hasta la Plaza Sant Jaume, donde se encuentra el Ayuntamiento y la Generalitat.

La tarde estará dedicada a recorrer las callejuelas del Barrio del Born, visitar el famoso Museo Picasso, la Basílica de Santa María del Mar y el Museo de Historia de Cataluña. Después llega el momento de pararse a descansar y disfrutar de una terraza junto al puerto antes de cenar algo en alguno de los restaurantes de la zona.

3días-agbarDía 4: Torre Agbar, Ciutadella y Villa Olímpica

El cuarto día comienza contemplando la arquitectura de la Torre Agbar. Tras admirar uno de los edificios más originales de Barcelona se puede continuar la visita recorriendo el Mercado de Encants, para después caminar por la Avenida Meridiana hasta llegar al magnífico Parque de Ciutadella. En esta ocasión, la mejor forma de aprovechar el parque es comprar algo de comer antes de entrar y disfrutar del buen tiempo con un picnic en el césped.

Después de comer se puede continuar recorriendo los jardines y lagos del parque e incluso visitar el zoológico. Un paseo por la Villa Olímpica y el puerto deportivo, una visita al aquarium y una cena en alguna de las terrazas de la zona completarán el cuarto día de visita.

Día 5: Playa, Barceloneta, Camp Nou y Tibidabo

La mañana del quinto día puede dedicarse a disfrutar del sol en alguna de las 9 playas del litoral barcelonés, para después recorrer el encantador barrio de la Barceloneta y degustar pescado y marisco fresco en alguno de sus restaurantes.

Por la tarde, la ruta puede continuar visitando el estadio del Camp Nou y el Monasterio de Pedralbes. Para completar la tarde nada mejor que visitar la torre de Collserola y el parque de atracciones del Tibidabo, que ofrece unas bonitas vistas de la ciudad y espectáculos nocturnos.